Gabriel Waisman, secretario de la Sociedad Argentina de Medicina (SAM) y jefe del Servicio de Clínica Médica del Hospital Italiano de Buenos Aires, considera que es muy difícil crear una unidad para el abordaje de todas las enfermedades raras en todos los establecimientos de salud.
“No es fácil poner a todas en la misma bolsa. Aunque todas son multisistémicas, afectan a distintos órganos y partes del cuerpo y tienen diferente origen”, manifiesta. Reconoce que, a excepción de cada especialista, “es muy difícil llegar al diagnóstico, porque los médicos no estamos muy alertas” y dice que, más que divulgación masiva en la población “es necesario una educación en la población médica para encontrar señales para la detección”. “Más que para la gente en general, el alerta debe ser para los médicos, que deben sospechar la existencia de la enfermedad cuando hay un grupo de síntomas”, enfatiza.