“Tengo diferencias con Cristina y me llevo bárbaro; tengo diferencias con Karina (Rabolini, su esposa) y hace 30 años que la conozco. Tener diferencias es bueno porque uno se complementa y se potencia”, comentó.
En un reportaje publicado ayer en Página 12, Scioli defendió los encuentros que tuvo con dirigentes del peronismo disidente y opositores. “Si tienen una representación institucional, no tengo problema en sentarme con nadie. Yo respeto las representaciones institucionales, las dio el pueblo y han llegado ahí por la voluntad de la gente. Respetarlas es respetar a la gente”, sostuvo.
Al respecto, el mandatario provincial relativizó las críticas efectuadas desde el oficialismo a esos encuentros políticos y señaló que inclusive la Presidenta habla muchas veces de la unidad nacional.