“En América latina la banda ancha, un insumo central, es cara y lenta”, comentó el especialista al referirse a lo deficitarias que son las tecnologías de la información y la comunicación (TICs).
“Quien tiene una empresa, sabe que el 75 por ciento del costo es el salario, tenemos un alto nivel de facturación por persona, cerca de 43 mil dólares per cápita”, dijo por su lado Louzao Andrade.
Para el experto, “entre las cosas que hay que atacar está cómo salimos al exterior”. “Es muy difícil -agregó- porque vender software no es lo mismo que vender cualquier cosa, es vender conocimiento”, enfatizó el titular de la Cámara de empresas del sector.
Existe, asimismo, un problema de acceso al financiamiento. “No somos pasibles de crédito bancario porque no cumplimos con varios requisitos, entonces el 85 por ciento se financia con reinversión de dinero”, indicó.
Brasil le compraba a la Argentina el uno por ciento del software y hoy se lleva el 11 por ciento. Son casi 100 millones de dólares. “Las retenciones de Brasil al software argentino son de 42,5 por ciento. ¿Cuánto más podríamos exportar con un buen acuerdo?”, preguntó.
71.500 son los empleados de la industria del software en la Argentina. Tenía 19 mil en 2003, cuando facturaba 830 millones de dólares. Sin embargo, se cree que las cifras son aún mayores por la gran cantidad de pequeñas firmas que no declaran sus datos. La facturación global sería de 3.340 millones de dólares.